Hasta ahora el viaje no ha dejado de agradarnos, ni ha parado de sorprendernos con cada lugar, cada experiencia y cada momento que hemos vivido, ahora es momento de dar paso al tercer día de esta increíble experiencia y para comenzar es importante mencionar que aquel día, aquí en México era un día festivo mientras que en Canadá era un día de trabajo normal, y resulta un dato importante porque esto nos permitió disfrutar de nuestros siguiente recorrido con tranquilidad, amplitud, y sin mucho trafico, excepto quizás por el regreso a Toronto, pero sin más por ahora preparémonos para disfrutar de las famosas Cataratas de Niágara o Niágara Falls, los no menos impresionantes Viñedos de Uva Congelada, el dulce y apetitoso Ice Wine, los bellos y acogedores Parques Nacionales y finalmente los maravillosos Atardeceres Nevados, que nos regalo este recorrido.
C-10 - Camino a Niágara
Era una mañana de Lunes en las tierras canadienses, tuvimos que despertarnos temprano para estar en la recepción del hotel a las 7:30 am, la razón era simple, teníamos programada una salida para conocer uno de los mas importantes iconos naturales de Canadá – Las Cataratas de Niágara.
Estuvimos diez minutos antes sin ningún problema, el guía llego, nos ubico y al tiempo que se presentaba y nos preguntaba por nuestro animo, nos comento que esperaríamos a otra familia que nos acompañaría.
La familia que se nos uniría en la excursión llego como quince minutos tarde a la cita, era una familia integrada por cuatro miembros madre, padre, y dos hijas, estas ultimas ya jovencitas de entre 16 y 18 años más o menos, se disculparon porque su vuelo recién había llegado a la ciudad durante la madrugada de ese día, provenientes de la India, un tema que nos causo curiosidad porque justo trabajaba para una compañía de la India, y posiblemente contribuyo a que la primera impresión fuera mucho mas amistosa.
Sin que esto resultara ser un problema en ningún sentido, nos movimos a nuestro transporte, y fue entonces cuando entendimos que seriamos todos los integrantes de esta excursión.
Nuestro guía tomo los controles de la camioneta y comenzó a conducir hacia las afueras de Toronto. La salida, considerando la hora de la mañana y que íbamos de hacia afuera, nos resulto simple y sin contratiempos, el trafico y los autos nos permitieron movernos sin mayores complicaciones, finalmente salimos de la ciudad y tomamos la carretera en camino a Niágara.
C-11 - Cataratas de Niágara
No era nuestra intención y por supuesto que no pretendíamos regresar a México sin haber pasado a ver las famosas Cataratas de Niágara, ya estábamos ahí a kilómetros de casa y la distancia entre Toronto y Niágara realmente era corta.
Durante el viaje desde Toronto y hasta Niágara, nuestro guía nos fue comentando un poco sobre los senderos que teníamos a nuestros costados, cotidianamente y con bastante frecuencia podíamos ver en el trayecto sembradíos, el nos explico que se trataba de uvas, si así como lo leen siembran uvas durante el invierno, y fue la primera vez que escuchamos sobre Viñedos de Uva Congelada, claro con cuidados muy específicos, pero fue algo que definitivamente no nos esperábamos, mas adelante en el viaje tendríamos oportunidad de retomar el tema.
Nuestra primer parada fue en un centro de información a poco mas de la mitad del camino, paramos para pasar a los sanitarios y comprar alguna golosina, aunque nosotros habíamos tenido tiempo de desayunar algo antes de salir del hotel así que hambre realmente no teníamos por lo que la parada fue reamente muy corta.
Finalmente, nuestro destino estaba a la vista, después de tanta espera, frente a nosotros estaban las Cataratas de Niágara, el paseo incluía un viaje en barco para conocerlas, y como todas las atracciones que hemos visitado hasta ahora, en esta había un pasillo en el que nos tomamos unas fotografías, las que seguramente podríamos comprar al final del recorrido, así que nos tomamos la fotografía y continuamos nuestro descenso hacia la embarcación, fue necesario utilizar un impermeable, el cual nos proporcionaron ahí mismo.
Mientras esperábamos instrucciones para abordar el barco, podíamos escuchar claramente el sonido del agua cayendo y mientras veíamos a las aves revolotear cerca de la misma.
El día estaba nublado y hacia un poco de frío, lo cual por supuesto que no nos detuvo, finalmente abordamos la embarcación y comenzó nuestro viaje en dirección a la caída principal, conforme nos acercábamos a la caída, se incrementaba la brisa, el frío se volvía mas intenso, logramos estar muy cerca de las aguas, lo suficiente como para tomar fotografías del impresionante tamaño y salir lo suficiente mojados y congelados de aquella experiencia que definitivamente no cambiaríamos por nada.
El barco dio la vuelta y condujimos de regreso al puerto de salida, al costado hay otra caída de agua que es un poco menos impresionante pero no por eso menos interesante, logramos volver al puerto y nos dirigimos a la salida, dejando los impermeables en un deposito, y pasando por la tienda de las fotografías y recuerdos.
Nos llego la hora del almuerzo, mientras hacíamos todo ese recorrido, no cabe duda que el tiempo vuela cuando te estas divirtiendo, el guía nos condujo cruzando la calle, hasta un gran hotel que esta enfrente, nos comento que ahí almorzaríamos.
Debemos confesar que la comida no fue nada extraordinaria, fue un servicio estilo buffet como de cualquier otro hotel, aunque la razón por la que esta en nuestros recuerdos, es porque fue justo ahí donde logramos apreciar desde otra increíble perspectiva de aquellas Cataratas de Niágara que hace unos momentos habíamos mirado desde abajo.
Es dificil describir con palabras aquella imagen, pero ver a lo lejos la ciudad, algunos arbustos tupidos, espacios cubiertos por la nieve, con ese fondo grisáceo del ambiente debido al nublado, la acumulación de aguas y el sendero por el que transitan hasta llegar a la gran caída de agua, fue definitivamente el complemento perfecto para esta ya de por si fantástica experiencia.
Para nuestra suerte, no todo terminaría ahí, tomamos algunas cuantas fotografías que sería imposible mostrar en este pequeño espacio, pero aquí les dejamos una pequeña muestra de lo que vimos, después de ello nos dispusimos a cumplir con nuestro objetivo que era comer, así que comimos, bebimos, y nos reunimos con el guía en la parte inferior del hotel, donde gastamos otros 20 minutos adicionales curioseando en la tienda del hotel, con toda la intención de comprar algún bonito recuerdo, sin embargo, fueron solo unas postales las que lograron atraer nuestra atención.
Estábamos listos para continuar con nuestro recorrido, por lo que volvimos con la otra familia y con nuestro guía a la camioneta que nos llevaría al siguiente destino, pero antes de partir, el guía aun nos reservaba una sorpresa más, tomamos camino contrario al que debíamos para continuar la marcha, anduvimos unos 15 minutos adicionales, mientras el guía nos contaba un poco de las historias y leyendas que rodeaban las aguas de las Niágara Falls.
Finalmente, nos detuvimos en un mirador, que quedaba en la parte superior de las Cataratas de Niágara, lo cual redondeo perfectamente nuestra aventura, habíamos mirado desde abajo las famosas Niágara Falls, también las habíamos observado desde las alturas y ahora nos tocaba mirarlas de cerca por un costado y por arriba, definitivamente habíamos visto en un mismo recorrido todas las vistas que se pueden tener de este tan famoso espectáculo natural, claro desde el lado de Canadá, muchos dicen que es el mejor lado, y no podemos estar mas de acuerdo, aún cuando no hemos estado en Estados Unidos, pero basta mirar los paisajes y las posiciones en las que estuvimos para confirmarlo.
C-12 - Parques Naturales y Un Poco Más
Finalmente, llego el momento de decir adiós a las Cataratas del Niágara, habíamos visto y sentido estas aguas hasta cansarnos, al menos por ahora, y nuestro viaje aún tenia otro destino, y un camino que tomar para alcanzarlo, así que retomamos el viaje.
Anduvimos algunos otros kilómetros, y en el camino vimos grandes y bellas casas, también vimos a donde se dirigía el agua de las Niágara Falls mas adelante siguiendo su cause, sin mencionar que también fue posible toparnos con alguno que otro de los famosísimos Parques Nacionales en el trayecto.
Hicimos unas paradas, para tomar algunas fotografías, y tomamos algunas otras desde el transporte en movimiento, pero cada nuevo escenario, era tan genial o mejor que el anterior, no nos cansábamos de mirar, de conocer y de explorar aquel nuevo mundo para nosotros.
Todo estaba resultando fantástico, todos estábamos disfrutando el recorrido y la experiencia, pero nuestra suerte estaba a punto de darnos otra oportunidad de llevarnos algo mas de aquellas tierras, la naturaleza en su infinita sabiduría y en total y completo balance con la humanidad nos dio la oportunidad de ver unos venados, en uno de los Parques Nacionales de Niágara, estaban descansando en la mitad del parque, los contemplamos por algunos momentos y sin invadir en ningún momento su espacio, logramos traer no solo el recuerdo de la vivencia sino la captura de una imagen que nos permite recordar aquel mágico momento por siempre.
C-13 - Los Viñedos de Uva Congelada y El Ice Wine
La escena con los venados fue fantástica, pero debíamos continuar, así que retomamos el camino, hasta que finalmente llegamos a nuestra siguiente parada oficial, se trataba de un muy particular sitio, similar a muchos otros que vimos en el camino mientras nos dirigíamos a Niágara e incluso cuando dejamos las Cataratas de Niágara para dirigirnos a este nuevo lugar, estamos hablando de un autentico Viñedo de Uva Congelada.
Si ya algo entrada la tarde, llegamos como parte del recorrido a un Viñedo de Uva Congelada, que a diferencia de lo que habíamos visto en el pasado o incluso en la películas, no era el clásico color verde de los pastos y el color de las uvas, verdes o rojas, este escenario era un tanto diferente, con los pisos cubiertos de blanco por la nieve y las plantas en tonos cafés, un espectáculo de otro mundo, y si se lo están preguntando en realidad las uvas no están congeladas, pero si están en un clima muy frío y requieren de un tratamiento especial.
Después de admirar el exterior, pasamos a través de la tienda hasta la parte de atrás del establecimiento, donde recibimos en primer lugar una explicación bastante interesante de como lograron superar las adversidades del clima para lograr que las uvas maduraran, en otras palabras nos explicaron en breves imagenes como cuidan de las plantas para lograr que no se descompongan con la nieve y por el contrario, se conviertan en una producción especial que da origen a un vino también especial al cual han llamado ICE WINE.
Aunque nosotros ya habíamos tenido oportunidad de probar un día antes este vino, claro que no perdimos la oportunidad de volver a degustar una copa mas de Ice Wine, y de paso animarnos a comprar una botella o dos para llevar a casa y compartir con la familia.
C-14 - Atardeceres Nevados
El día comenzaba a llegar a su final, y dejamos el viñedo, para encaminarnos de regreso a Toronto.
Antes de entrar a la carretera en dirección a nuestro hotel, nuestro guía nos llevo a un pequeño y tradicional poblado de Niágara, donde tuvimos unos momentos para poder tomar un café, disfrutar de la calidez de sus habitantes, y como adicional las bellas decoraciones navideñas de la temporada en los establecimientos y casas.
Todo estaba resultando mas que agradable, pero el tiempo no perdona, comenzaba hacerse tarde y nuestro tiempo en este sueño estaba terminándose, nos volvimos a reunir todos en la camioneta y ahora si emprendimos el regreso al hotel para terminar el día.
La comunidad de Niágara nos despidió con unos bonitos Atardeceres Nevados en tonos blancos y dorados, un escenario que no habíamos visto antes, y que sin duda vale la pena recordar.
El día fue mas que gratificante, intenso y lleno de experiencias, no había nada mas que hacer en este día, simplemente volver al hotel y descansar.
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Álbumes Cataratas de Niagara
Debido a que es mas dificil publicar todas las maravillosas imágenes que obtuvimos en Niágara aquí en el blog, es por lo que les invitamos a revisar los siguientes álbumes de la maravillosa Población de Niágara, las increíbles cataratas de Niágara (Niágara Falls), los increibles Viñedos de Uva Congelada, los exquisitos Parques Nacionales, sus no menos atractivos Atardeceres Nevados y toda la belleza que hay en este precioso lugar, tampoco se olviden de probar el Ice Wine, tal vez les guste tal vez no, pero la experiencia no pueden perdersela.
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Hasta la próxima.
